Emery, la consagración de un libreto

Muchas instantáneas quedarán ancladas en la memoria de los aficionados del Villarreal tras su victoria en Turín. Rulli y sus paradas, Danjuma y su poderosa zancada o la superioridad técnica de Gerard Moreno, héroe tras cinco semanas lesionado. El equipo, que es el actual campeón de la Europa League, consiguió en Italia el tercer pase en su historia a los cuartos de final de la Champions League, palabras mayores. Sin embargo, fue Unai Emery quien movió los hilos de la victoria con sus cambios y su plan de partido. La consagración de un libreto que acaba de ganar su primera eliminatoria en la máxima competición europea.

El entrenador vasco, que reconoció haber escuchado la oferta del Newcastle en noviembre para dirigir al nuevo rico del fútbol mundial, ha encontrado en Castellón su lugar en el mundo. El equipo funciona, crece y tumba a escudos mucho más poderosos en lo económico. Solo así se entiende que, tras 14 años de carrera en los banquillos de la élite, Emery haya pasado a los cuartos de final.

Debutó en la temporada 10/11 con el Valencia y fue el Shalke quien lo tumbó en octavos. A la temporada siguiente ni siquiera pudo pasar de grupos con los ches. Volvió a la Champions en 2012 pero ya con el Spartak de Moscú y su destino fue el mismo que con los españoles. Con el Sevilla, en 2015, tampoco pudo alcanzar las eliminatorias pese a que su prematura eliminación le permitió llegar a la Europa League, que ganó con los andaluces.

En 2016 firmó por el PSG, uno de los proyectos más potentes de Europa aunque en aquel momento no contaban con Messi, Neymar ni Mbappé. En aquella ocasión Emery pasó a la historia pero por sufrir una de las mayores remontadas de la competición. Del 4-0 en París al 6-1 de Barcelona. Se le dio vida extra y un año después, esta vez con Mbappé y Neymar en su bando, fueron apeados por el Real Madrid (5-2 en el global). Un camino arduo y lleno de derrotas que al fin recibe su ansiado premio entre los más grandes.