Un cartel ruso de propaganda bélica está siendo muy comentado entre militares españoles. No es porque amenace con una guerra nuclear, ni porque aporte detalles de armamento ruso que se desconozcan, ni por un argumentario más o menos discutible sobre la invasión de Ucrania. Es una curiosa chapuza lo que está atrayendo la atención de integrantes de las Fuerzas Armadas, porque su creador ha terminado haciendo aparecer un carro Leopard español como si se tratara de un tanque ruso.
El cartel ha aparecido ante los ojos de los vecinos de Kislovodsk, ciudad del sur de la Federación Rusa, cerca de Stavropol y del mar Negro, y después se fue haciendo más conocido entre el público local por su difusión en redes sociales ruras, hasta que ha trascendido en Occidente.
«¿Estás con nosotros?», pregunta el anuncio desde una valla publicitaria situada sobre un tejado. Y cierra con el eslogan «Kislovodsk, ciudad patriota». Un soldado supuestamente ruso aparece en primer plano. Y en el segundo está el problema: se ve un carro de combate con dos tanquistas por encima de su torre,. Uno de ellos porta un estandarte que corta la imagen. Ese estandarte era español y correspondió a alguna unidad dotada con carros Leopard.
Alteraciones
Contra lo que en un principio pudiera parecer, no se trata de un carro ruso. Especialistas del arma de Caballería del Ejército confirman a EL PERIÓDICO que se trata de un carro Leopard 2E español, uno de los 213 que le quedan al Ejército. La foto está sacada de una colección de instantáneas de un desfile de las Fuerzas Armadas, muy probablemente de un 12 de octubre de antes de la pandemia. No se han hecho esperar los comentarios de los seguidores en redes sociales de los asuntos de la guerra de Ucrania.
Los soldados llevan los característicos guantes blancos de gala para una parada militar en día de fiesta y aparecen en la forma en que se exhiben los carristas españoles en este tipo de celebraciones. La foto, estiman dos expertos consultados, ha sido alterada. La imagen está virada, se ha aclarado hasta parecer blanco el color de la cinta portaestandarte de uno de los dos militares y se ha retirado el escudo del lateral del vehículo, seguramente de la Brigada Guadarrama, apuesta una de las fuentes.
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Lo que para ambos expertos es indiscutible es que se trata de un carro de combate Leopard 2E, español y con el inconfundible cañón que lo corona, de 120 milímetros y fabricado por la firma alemana Rheinmetall. La posible razón de que aparezca un tanque español en un anuncio ruso para animar a la población como si fuera propio del ejército del Kremlin es que el anuncio se haya diseñado tirando de alguna foto de las que circulan libremente en Internet. En Wikipedia, sin ir más lejos, hay imágenes muy parecidas.
En las mismas redes sociales que difundieron este anuncio hace un par de semanas no ha aparecido aún noticia alguna acerca del destino que ha podido correr el autor, autora o director artístico del cartelón por esta supuesta equivocación suya.
